¿Has sentido miedo irracional?, ¿que la impotencia te supera? La salida está cerrada o nuestra mente nos hace creer que está bloqueada, pero el cerrojo está en tu esencia y la llave en tu autoconocimiento. La descarga es a veces la más sencilla herramienta y parece fácil, lo difícil es escucharla sin juzgar.
El cerebro es un músculo entrenable y redondo como un mundo, por lo que puedes hacer que tus miedos giren en espiral y, con efecto centrífugo, cuando más potente lo hagas, más pronto los harás desaparecer. Vivir en la positividad suena tan irreal que provoca desgano y niega tus lugares oscuros, que están ahí, son parte de ti, no van a desaparecer. En ocasiones, nos sentimos inútiles decorando esos lugares profundos, pero es solo un intento de reconocerlos, darles el lugar, dejarlo ser y demostrarte a ti mismo que eres lo que decides ser.
La insatisfacción en este mundo extraño, donde uno se siente sapo de otro pozo, es más común de lo que nos hacen creer. Y ver en ello un privilegio es un ejercicio que no debes jamás dejar de hacer. Recordando a Hermann Hesse, repito sin cansancio: "Quien no encaja en el mundo está siempre cerca de encontrarse a sí mismo".